¿Por qué necesitas un programa de entrenamiento y no solo ejercicios al azar?
- KLAN

- 2 sept
- 3 Min. de lectura
El otro día fui al SAMS y me di cuenta de algo curioso: ahí hay muchas menos opciones que en un súper. Si vas al súper, tienes un pasillo lleno de marcas diferentes del mismo producto. Pero en SAMS no. Hay menos variedad, pero lo que encuentras es de buena calidad. Y la verdad, eso me gustó.
¿Por qué? Porque gasté menos tiempo, pensé menos, me estresé menos buscando entre tanta opción y al final me llevé productos buenos para mi cuerpo. Y esto me hizo pensar que en el entrenamiento pasa exactamente lo mismo: no necesitas un montón de ejercicios diferentes, necesitas un plan bien diseñado con movimientos de calidad.
En KLAN lo tenemos muy claro: seguimos una programación de fuerza real, con estructura y propósito.
Así funciona la programación en KLAN
En KLAN trabajamos bloques de 6 semanas. Durante esas semanas:
Entrenamos la misma rutina martes y jueves.
La semana siguiente cambiamos la rutina, pero de nuevo la repetimos martes y jueves.
Al final del bloque habrás practicado, dominado y medido tu progreso en movimientos clave.
Lo hacemos así porque el entrenamiento de fuerza funciona como un camino: cuanto más caminas por el mismo sendero, más claro y más sólido se vuelve. Y ese sendero es el que va a convertirte en más fuerte.
¿Por qué repetir rutinas funciona mejor?
Primera vez = incertidumbre
Cuando haces un ejercicio por primera vez, siempre hay incertidumbre. No sabes cuánta energía gastarás, no sabes cómo terminarás. Inconscientemente guardas energía y eso hace que la sesión sea menos efectiva.
La práctica crea maestría
No basta con hacer un ejercicio una vez. Para mejorar técnica, fuerza y propriocepción (la conciencia de tu cuerpo y de qué músculos estás usando), necesitas practicarlo varias veces. Repetirlo es la única forma de sentirlo realmente.
Medición real de progreso
¿Cómo sabes si eres más fuerte si cada vez cambias de ejercicio? Al repetir un movimiento puedes ver claramente si ahora lo haces con más control, con mejor técnica o con más peso. Esa es la forma más simple y honesta de medir avances.
El camino de la fuerza
Cada repetición refuerza la “ruta” por donde pasa el estímulo de la fuerza. Cuanto más la recorres, más ancho y sólido se vuelve ese camino. Eso, traducido, es ser más fuerte.
Lo que solo un plan de entrenamiento te puede dar
Otra cosa muy importante es que cuando entrenas con un plan real y no al azar, puedes planear descansos y controlar las intensidades.
Eso significa que un lunes puede ser más ligero para prepararte para un martes más intenso.
También implica que no sobrecargas siempre los mismos músculos o patrones de movimiento.
Esa es la diferencia entre entrenar con estrategia y entrenar “como caiga”. Solo cuando hay planeación se puede progresar sin lastimarte ni estancarte.
La verdad sobre la “variedad infinita”
Sé que hacer siempre ejercicios diferentes puede ser divertido, entretenido y hasta motivante al inicio. Pero la realidad es que eso no genera un beneficio real a largo plazo.
He tenido muchos alumnos de entrenamiento personalizado que me piden que cambie sus ejercicios constantemente, y aquí hay algo que deben entender: cuando contratas a un entrenador o buscas un resultado específico, nosotros conocemos el camino para llegar ahí.
No se trata de hacer lo que te parece divertido en el momento, sino lo que está trazado en el plan. Es igual que ir con un doctor: imagina que te receta un medicamento para curarte, pero dices que “sabe feo” y prefieres tomar otra cosa que nada tiene que ver, solo porque sabe más rico. No tendría sentido, ¿verdad? Pues con el entrenamiento pasa igual.
Sí, a veces puede sentirse repetitivo o un poco tedioso, pero con el tiempo te das cuenta que es la única manera real de progresar.
Menos opciones, más claridad
Hoy en día hay demasiada información y demasiadas opciones en internet. Y aunque parezca lo contrario, lo que más necesitamos es lo opuesto: reducir opciones y simplificar las decisiones.
Un buen plan de entrenamiento hace justamente eso: te da claridad, propósito y resultados reales.
En resumen
El progreso real no viene de hacer “lo que se me antoja hoy”, sino de tener un mapa que te lleve del punto A al punto B. En KLAN te damos ese mapa: rutinas claras, enfocadas en fuerza y diseñadas para que veas resultados en semanas, no en ocurrencias.
Y recuerda: si tienes dudas sobre cómo funciona el programa, cómo hacer un ejercicio o cómo se estructura el plan de cada 6 semanas, pregúntanos. Estamos aquí para guiarte.
👉 Entrenar fuerte no es entrenar mucho ni entrenar con mil ejercicios diferentes. Entrenar fuerte es entrenar con un propósito.





Llevame al Sam's!! 😜
Nada aburrido el entrenamiento, al contrario. Y justo me gusta ver el progreso cuando se repiten los ejercicios.
Gracias coaches!